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Arquitectos: Mecate Studio
- Área: 150 m²
- Año: 2019
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Fotografías:Zaickz Moz
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Proveedores: Archicad, Llano de la Torre, Murart
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Casa Ribera se ubica en un inmueble histórico datado a finales del Siglo XIX ubicado en el corazón de Santa María la Ribera, Alcaldía de Cuauhtémoc en la Ciudad de México.
La casa está constituida por dos crujías, la crujía frontal se encuentra catalogada por el INBA; la segunda se extiende a lo largo de la propiedad con un patio lateral, característico de las casas de esa época.
La casona “Casa Ribera” contiene el restaurante XUVA’, el despacho de diseño textil Balmaceda Studio, la galería SAQ, la tienda de arte y diseño Mecate Home y el despacho de arquitectura y diseño Mecate Studio. Espacio concebido para la difusión y creación de arte y cultura en diversas disciplinas generando cercanía entre el espectador y el artista creador.
El primer reto de diseño fue rescatar la estructura espacial original y devolver la fuerza tectónica de los grandes muros, ya que los espacios habían sufrido múltiples cambios a lo largo del tiempo, así como rescatar y enaltecer sus elementos ornamentales.
XUVA’ restaurante, surge a raíz de un viaje con el chef Juan Aquino a su querencia en la costa oaxaqueña, creamos un espacio que fuera una alegoría a la rica y colorida comunidad Mixteca - Tacuate, un lugar que evoca a la zona montañosa de Santa María Zacatepec.
XUVA’ se desplanta en el patio lateral de la casa en el antiguo estacionamiento, un espacio angosto y largo, un marco original de cantera sirve como elemento que anuncia la entrada a un nuevo espacio interior que se abre y es exterior, lugar que invita a adentrase en él.
El espacio entre el techo traslúcido y el plafón vegetal funciona como una cámara térmica que climatiza el restaurante y a su vez contiene el huerto orgánico donde se siembran algunos de los ingredientes que se utilizan en los platillos.
Cada uno de los elementos fue diseñado y fabricado especialmente para XUVA’, desde el piso de mosaico artesanal fabricado en barro que hace alusión a la sombra de los árboles, las mesas de granito pulido que en su reflejo contienen el cielo que se deja ver entre la intrincada vegetación de su plafón arbóreo, las sillas y los bancos de metal y piel que brindan cobijo al tacto, hasta la vajilla de cerámica de alta temperatura que elogia a la mano que transforma el material.
Un espacio de proporciones intimas que te envuelve en su vegetación exuberante, colores radiantes y materiales puros y expresivos. Espacio vivo que rompe con la velocidad citadina y te traslada al sosiego de la costa oaxaqueña en una atmósfera de calidez y frescura.